Reflejo de su Luz

Del mismo modo, procuren ustedes que su luz brille delante de la gente, para que, viendo el bien que ustedes hacen, todos alaben a su Padre que está en el cielo. Mateo 5:16 DHH

Generate by Meta AI

La luna no brilla por sí misma, sino que la luz que vemos ella es el reflejo del sol ¿Lo sabías?

Algunas de nosotras probablemente lo habíamos escuchado y otras no.

Hoy te invito a reflexionar en tu vida, en tu historia, en el camino que recorriste hasta este momento y en cómo estás terminando este día.

Nuestra construcción tradicional de cómo debe ser un cristiano se ha erigido fuertemente en nuestra mente llevándonos a tener ciertas concepciones acerca de cómo debo ser para se una buena hija de Dios. Medimos nuestra vida cristiana basadas en las horas que invertimos en el ministerio, en las buenas obras que hacemos para con los demás, en la cantidad de versículos que leemos cada día, en la cantidad de minutos u horas que invertimos en la oración; medimos el éxito de nuestra vida como seguidoras de Jesús basándonos en la cantidad de pecados que evitamos cometer hoy para enorgullecernos o en la cantidad de pecados que sí cometimos para avergonzarnos. Si lo pensás profundamente, éstas ideas no tienen nada que ver con el SER y tienen todo que ver con el hacer.

Expresado en palabras escritas suena fuerte, pero es real. En mi experiencia religiosa viví atada a éstos parámetros, viví orientada al hacer y viví rodeada de personas que no paraban (y no paran) de enumerar hitos para sentirse dignas hijas de Dios.

Lo cierto que la sutileza del engaño del nuestro enemigo nos convirtió en seres casi perfectos, o al menos así lo expresa nuestro discurso: Casi que nadie peca, casi todos somos generosos y piadosos, sacrificiales en el servicio o eso es lo que creemos, es lo que pensamos, es lo que expresamos hacia afuera y es lo que nos decimos a nostras mismas.: "por acá voy bien"; "estoy cumpliendo con los requisitos esperables de una cristiana modelo" "soy digna de ser amada por Dios y soy ejemplo a otros"

Si te parece que no es así volvé a leer el texto siendo honesta con vos misma y viendo tu andar a luz de la descripción anterior.

Ahora pensemos juntas que esta medición de la eficiencia de la vida la cristiana no es tal, sino que por el contrario nos hace caminar en culpa, en frustración, caminamos en orgullo, en perfeccionismo e incluso muchas veces caminamos en hipocresía. ¡Y es que nadie es capaz de cubrir la totalidad de los ítems el mismo día, todos los días de la vida! Con éstos elevados estándares empezamos a mirar al prójimo sin piedad, perdemos la capacidad de tener misericordia del otro y de notras mismas. Si alguna vez te embarcaste en este modelo de evangelio o de vida cristiana sabrás que es una vía casi imposible de caminar y que aunque a veces te das cuenta que algo no está bien, tenés que seguir adelante ya que la ruta carece de amplitud para un cambio de sentido.

¡TENGO BUENAS NOTICIAS! Dios nos ama por quienes SOMOS y no por lo que hacemos, él está interesado en que Jesús sea en nosotras de tal modo que podamos vivir esa vida cristiana ideal pero libres. Soltando el control y cediéndolo a Jesús.

Cuando esto pasa, cuando nos rendimos reconociendo que no se trata de nosotras sino de él reflejando su luz. ¡Es maravilloso! Cuando ese día llega, cuando en humildad reconocés que dependes de él 100% del Padre experimentás LIBERTAD. Jesús no te pide nada que sea dificíl, como dice el libro de Miqueas: "¡No! Oh pueblo, el Señor te ha dicho lo que es bueno, y lo que él exige de ti: que hagas lo que es correcto, que ames la compasión y que camines humildemente con tu Dios."

SOMOS LA LUNA, es una metáfora bella en la que pensé hoy, imaginando que el sol es nuestro Dios y nosotras la luna.

Cuando pienses que no sos suficiente pensá en la luna, ella no se levanta preocupada por cómo va a hacer para ser una "buena Luna" o una "luna ejemplar", simplemente está ocupando su lugar en la creación y reflejando excepcionalmente la luz del sol. Lo hace de diferentes maneras; según la fase en la que se encuentre refleja más o menos luz, pero siempre refleja luz. Pensá también en su rol en los eclipses. En eclipse solar cuando la luna queda totalmente oscura, el sol resplandece fuertemente tras ella, y en el eclipse lunar cuando la Tierra bloquea los rayos solares vemos en el cielo una luna roja.

Me gusta reflexionar en que en nuestros momentos oscuros es cuando más gloria de Dios reflejamos, reflejamos su luz y dejamos ver que somos fruto de la sangre preciosa de Jesús.

Hoy agradecele a Jesús por ser una obra maestra de su creación y por ser un reflejo de su luz.