Desactivando Trampas
- Eliana Salinas

- 28 mar
- 4 Min. de lectura

Para que Satanás no se aproveche de nosotros. Pues ya conocemos sus maquinaciones malignas.
2 Corintios 2:11 NTV
Estamos cerrando un mes y empezando uno nuevo. Estuve pensando en las reflexiones que podemos tener este viernes y los que vienen. Creo que estaría muy bueno que nos enfoquemos en la advertencia que nos ofrece Pablo en 2 Corintios 2:11.
El apóstol nos enseña que debemos estar conscientes de la maldad del enemigo para que él no se aproveche de nosotras.
La versión Reina Valera dice “No ignoramos sus maquinaciones”Quiero que este día podamos detenernos a pensar en las distintas trampas que nos tiende el enemigo, cuya finalidad ha sido la misma a través de los siglos: robar, matar y destruir.
Si yo te pidiera que describieras a satanás ¿cómo lo harías? Sería algo como: es un ser oscuro y despiadado que está todo el tiempo a nuestro alrededor intentando derribarnos… o no lo sé. Puedes tomar un momento para pensarlo…
Ahora bien, ya que tenemos delineada nuestra imagen del enemigo vamos a empezar a desmitificar su figura.
En primer lugar, contrario a lo que podríamos imaginar la Biblia describe al enemigo como un Ángel de Luz: “…porque el mismo Satanás se disfraza como ángel de luz. 2 Corintios 11:14b RVR.
Lo primero que debemos aprender es que el enemigo no será grotesco al acercarse a nosotras, sino que será sutil. Él no está apurado, sus estrategias de destrucción son imperceptibles.
En segundo lugar, tenemos que saber que él no es Dios, por lo tanto, no es Omnipresente. No tiene la potestad de estar en varios lugares al mismo tiempo. La Omnipotencia, la Omnisciencia y la Omnipresencia son atributos exclusivos de nuestro Dios, por lo cual satanás opera en alianza con su ejército compuesto por principados, potestades, gobernadores de las tinieblas y huestes espirituales de maldad en las regiones celestes (Efesios 6:18)
Ahora te invito a que mires tu vida pensando en aquello con lo has lidiado o lidias siempre. Quizás sea una adicción, quizás sea una práctica relacionada con la hechicería o la adivinación, puede ser también que lidies con relaciones complicadas, con mala administración financiera, con la envidia, el orgullo, la vanidad, la codicia; quizás a lo largo de tu vida pensaste que sos víctima de las circunstancias, quizás haya falta de perdón en tu corazón, o temor, o ansiedad, depresión, angustia. La lista es interminable.
Una de mis guías espirituales me enseñó que, si hemos lidiado con alguna dificultad en lo espiritual, en lo físico o en lo emocional en distintos periodos de la vida significa que un principado está oprimiéndonos. Me tocó lidiar con el abuso a muy temprana edad, y sin percibirlo ese patrón se repitió en mi vida en otras áreas como, la amistad, las relaciones familiares, laborales e incluso ministeriales.
Sin saberlo había decidido caminar en esclavitud, pensando que era merecedora de lo que sucedía en mi vida, tomando un papel de víctima de las circunstancias y creyendo que Dios había decidido que ese fuera mi destino.
En tercer lugar, te invito a que tomes tu lugar de hija de Dios, y tomes autoridad espiritual sobre aquello que te ha esclavizado por años ¿Qué es? ¿Con qué estás lidiando hoy?
Hagamos juntas esta oración:“Padre celestial en este día he descubierto que el enemigo ha estado en mi vida haciendo y deshaciendo a su antojo lo que ha querido y lo que yo en mi ignorancia permití. He atravesado distintas adversidades a lo largo de mi camino, pero no me había dado cuenta de que él desde la oscuridad orquestó este mal con el que me ha tocado lidiar toda mi vida (puedes mencionar cuál o cuáles son tus luchas recurrentes).A partir de este día pronuncio en voz alta tu palabra que dice: Pero ustedes no son así porque son un pueblo elegido. Son sacerdotes del Rey, una nación santa, posesión exclusiva de Dios. Por eso pueden mostrar a otros la bondad de Dios, pues él los ha llamado a salir de la oscuridad y entrar en su luz maravillosa. (1 Pedro 2:9)
Renuncio a la creencia de que soy merecedora del mal Satanás ha querido hacer en mí y creo que soy tu hija elegida, amada, parte de tu familia real y que tu mano poderosa me saca de las tinieblas para traerme a tu LUZ.Oro en el nombre de Jesús. Amén.
Aprendí hace un tiempo y quiero compartir con vos que, DE DONDE DIOS TE SACÓ, ES DONDE QUIERE DARTE SU AUTORIDAD.
Ya no mires tu historia como si fueras la víctima Del dolor; el sufrimiento; el duelo; los abusos; sino, mirala desde la perspectiva divina. Sabiendo que lo que el enemigo pensó para hacerte mal, Dios lo transforma en bien. Tu vida va inspirar y a traer libertad a muchas mujeres que estén lidiando o que hayan lidiado con lo mismo que vos.
¡Sos fundamental en el plan divino!
Hoy te invito a que derribemos de nuestra mente esta FORTALEZA mental que nos mantuvo en esclavitud y tomemos la autoridad de Cristo para caminar libres!
















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