Caminando sobre el agua.

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Pero Jesús les habló de inmediato:

—No tengan miedo —dijo—. ¡Tengan ánimo! ¡Yo estoy aquí!

Entonces Pedro lo llamó:

—Señor, si realmente eres tú, ordéname que vaya hacia ti caminando sobre el agua.

—Sí, ven —dijo Jesús.

Entonces Pedro se bajó por el costado de la barca y caminó sobre el agua hacia Jesús, pero cuando vio el fuerte viento y las olas, se aterrorizó y comenzó a hundirse.

—¡Sálvame, Señor! —gritó.

De inmediato, Jesús extendió la mano y lo agarró.

—Tienes tan poca fe —le dijo Jesús—. ¿Por qué dudaste de mí?

Mateo 14:27-30 NTV

Me encanta leer esta historia, no me canso de ver al maestro en acción. Es maravilloso este relato de Mateo donde el carácter de Jesús se ve reflejado a detalle.

Lo primero que quiero que analicemos es a Pedro, escuché muchas prédicas acerca de la FALTA DE FE DE PEDRO, acerca de su debilidad, de su inconsistencia.

Pero hoy quiero que juntas cambiemos la perspectiva de Pedro, ya que, si lo analizamos seguramente, más de una de nosotras se sentiría identificada su actitud.

¿No te pasa que por momentos sentís que tu fe está tan alta que puede pasar lo que sea y vos vas a estar inconmovible? Tenemos momentos de crecimiento constante, oportunidades de compartir el mensaje de Jesús, oportunidades de orar por las personas, nos sentimos tremendas mujeres de Dios, falta que caminemos por la vida preguntando ¿Qué sigue Señor?

Cuando de un momento a otro sin previo aviso, entran en tu mente y en tu corazón un montón de dudas, surgen temores, enfrentás cuestionamientos, y comenzás a vivir circunstancias desafiantes; tan desafiantes que ya no estás segura, ni empoderada, ni firme, ni llena de fe, mucho menos inconmovible; ahora estás asustada, dubitativa, y confrontada, hasta sentís que te estás hundiendo y que no hay salida. Pero es en ese momento en el que te rendís y gritás como nuestro amigo Pedro: ¡Sálvame Jesús!

¡Y en ese momento se produce el milagro! Jesús te sostiene de su mano y te rescata. También te hace reflexionar en por qué dudas, no lo hace para condenarte, lo hace para que seas consciente de que Él estuvo, está y estará siempre a tu lado.

Una de las herramientas más poderosas para caminar en fe es la convicción. Si estás convencido de que algo es como es y que funciona como funciona tu mundo se va a desarrollar en base a esa creencia pero sin convicción, es difícil que suceda.

La Biblia dice que la fe es la certeza de lo que se espera y la convicción de lo que no se ve. Jesús ha sido bueno y fiel, Jesús es bueno y fiel ¿entonces qué tengo que esperar? Que Él siga siendo bueno fiel. Esperamos en él aunque no vemos su mano actuar, y no sabemos cómo se dará el futuro pero; lo que sí sabemos es cómo es Él.

Él es Dios desde la eternidad y hasta la eternidad. Es reconfortante tener certeza en la vida. En general cuando este mundo nos ofrece certezas en ciertos temas solemos vivir más relajados, (volvé a leer por favor.)

Sí, nos sentimos calmadas con cosas simples y perecederas como un salario fijo al final del mes, una casa, un auto, una familia, una carrera, un nombre. Todas cosas finitas, que pueden marchitarse, pero la misericordia, la bondad y el fiel amor de Dios son eternas.

Pedro años más tarde cuando Jesús había ascendido al cielo escribió este texto: “Bendito el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que según su grande misericordia nos hizo renacer para una esperanza viva, por la resurrección de Jesucristo de los muertos, para una herencia incorruptible, incontaminada e inmarcesible” 1 Pedro 1:3-4 RVR. El mismo Pedro que dudó y cuyo accionar fue cuestionado por mucho y es usado de ejemplo para lo que no debería hacerse, escribió que nuestra herencia es INMARCESIBLE, me gusta esta palabra que usa la Versión Reina Valera para expresar que la esperanza de la herencia que tenemos en Jesús no se marchita, no se muere. Es eterna.

Te animo a que, aunque pases momentos de valle en tu fe, recuerdes que Jesús está cerca para sostener tu mano y que te va a levantar porque es lo que Él hace con quienes lo amamos. También te animo a que tengas la confianza de que cuando pase el momento de duda, vas entender que la dependencia de Dios trae seguridad y la tormenta se vuelve calma.

Antes de terminar quiero dejarte el enlace con la escena de THE CHOSEN donde la interpretación de este pasaje bíblico es sublime.

Espero que sea de inspiración:

https://www.youtube.com/watch?v=-KIhixEk_o0

Hoy recordá que la mano de Jesús te sostiene.